Banana Boats y mi Fujifilm
Con lo de oro parece, plata no es podríamos dar comienzo a lo que viene a continuación. En Delicious Martha os traigo una receta más que fácil, pero súper bonita. No es más que una forma de presentar un postre, pero que va muy ligada a otra cosa de la que quiero hablaros. Con estos banana boats o barquitos de plátano también quiero explicar un poquito mi experiencia con la fotografía y la cámara que llevo usando unas semanas y me ha cautivado. Encontraréis toda la info sobre ello en este post.
Y me diréis, ¿qué relación tiene? Pues más de la que podéis imaginar. Una de mis premisas es que la comida entre por los ojos, que tengas ganas de devorarla a dos carrillos sólo con echarle un ojo. Y por supuesto, un equipo que capte su belleza y todo su esplendor es necesario. Por eso, desde que uso mi cámara Fujifilm que mis fotos creo que transmiten más. De hecho, muchos me habéis comentado que habíais notado este cambio.
Pero antes de desvelar todo, vamos a llenarnos el estómago con estos banana boats. Sabéis que soy de darle la vuelta a aquello cotidiano; ya es como mi premisa. Pues bien, algo tan básico como un helado y unos frutos rojos congelados, se pueden convertir en un postre que jamás habrías imaginado tan bonito. Lo mejor de todo, que podemos prepararlo antes y dejarlo en el congelador para que mantenga la forma. Lo decoramos con unas hojas de menta y algo de fruta fresca antes de servir y preparaos para dejar a todo el mundo babeando.
Ingredientes para dos Banana boats:
- 2 plátanos
- Helado de chocolate
- Sorbete de limón
- Frutos rojos congelados
- Frambuesas frescas
- Hojas de menta
Preparación de los Banana boats:
Cortar el plátano por la parte interior de la ligera curva que tiene, realizando un corte en la piel de 1cm. aproximadamente. Con cuidado, retirar el plátano del interior de la piel. Con el plátano podemos hacer un batido, congelarlo y triturarlo para tener helado, o cortarlo y usarlo para la decoración.
Disponer el helado que se prefiera en el interior de la piel del plátano, decorar con la fruta congelada y guardar en el congelador hasta el momento de servir.
Para presentarlo, decorar con las hojas de menta y un poco de sirope de Ágave, con chocolate caliente, mermelada…
Y ahora vuelvo al tema de capturar el arte en la mesa. La comida que nos provocará placer sin tan siquiera degustarla. Mirar fotos de comida y que te transmitan más que el propio sabor. Me propongo contaros un poco más porque muchos me habéis preguntado qué equipo uso para hacer las fotos. Y sinceramente, hasta hace unas semanas mi iPhone servía como cámara, aunque algo limitado, me había funcionado bien hasta ahora… Pero con la importancia que le doy a la imagen y buscando cómo perfeccionar cada día mi trabajo, me puse a buscar un dispositivo que realmente me encantara, que realzara aún más las fotos de comida y con un resultado muy profesional desde alguien muy amateur. Y la encontré a ella. La X-T10.
O lo que es lo mismo, una cámara de fácil uso, puesto que no soy fotógrafa, pero que da buen resultado y puedo llevar conmigo a todas partes. Es cierto que siempre me ha gustado la fotografía, y que ya en la universidad me interesé por esta asignatura, pero nunca había experimentado yo misma con las ganas y los buenos resultados que me ha dado la Fujifilm X-T10. Me he lanzado a escribir sobre ello porque es cierto que alguno de vosotros ha notado el cambio y me lo ha comentado, y aquí no hay nada que esconder. Sí, las últimas fotos en Delicious Martha tienen una calidad extraordinaria, y va mucho más allá de lo que hasta ahora podía ofrecer. Por eso estoy tan contenta que no podía dejar de compartirlo con vosotros.
Ya sabéis que para cualquier cosa, podéis escribirme y estaré feliz de poder ayudaros.
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