Cómo hacer un MatchaLatte y un IceMatchaLatte
Cómo hacer un MatchaLatte y un IceMatchaLatte
Tanta si quieres alguna vez te has preguntado cómo hacer un MatchaLatte o hacer su versión en frío, el IceMatchaLatte, aquí encontrarás los sencillos pasos para prepararlo.
Para preparar el #MatchaLatte tan sólo necesitarás:
- 3/4 de taza de leche (si es vegetal, tener en cuenta que no todas espuman. La de vaca o la de anacardos es perfecta para crear estos dos dedos de espuma característicos del MatchaLatte, pero en cambio, con la de almendras te resultará imposible).
- 1 cucharada de polvo de Té Matcha
- Agua caliente, sin que llegue a hervir
- Endulzante si lo deseas: puede ser miel, Estevia, sirope de Agave…
Cómo prepararlo:
En una taza, ponemos la leche, y la calentamos 1 minuto en el microondas, o en un cazo, sin que llegue a hervir. Necesitaremos ahora un espumador eléctrico, un aparato con forma de bolígrafo y unas varillas al final que se sirve de unas pilas para batir la leche y hacer la espuma. Con él, batiremos la leche caliente, sobretodo por la superficie y sin sumergirlo por completo, hasta que forme dos dedos de espuma. En unos 3 minutos lo tendremos listo. Si queremos endulzarlo, añadiremos el que usemos antes de batir la leche.
Por otro lado, calentamos un poquito de agua, sin que llegue a hervir, y la ponemos en un recipiente donde tendremos el polvo de té Matcha. En un bol pequeño nos puede servir. Ahora, batiremos bien el Matcha para que quede totalmente disuelto y sin grumos. Normalmente se resiste un poco, así que tendremos que asegurarnos de que esté totalmente disuelto. Hasta ahora yo usaba el mismo espumador para batir el Matcha, pero he podido saber que el acero oxida el té, por lo que será mejor mezclar o con la misma varilla de bambú típicamente japonesa, o con una cucharita de madera.
Cuando esté bien disuelto, lo vertemos poco a poco sobre la leche, de forma que nos quedarán dos bonitas líneas de color. ¡Ya está listo para tomarlo!
¿Y si lo queremos frío? El #IceMatchaLatte será tu gran aliado. Para hacerlo, necesitarás:
- 3/4 de taza de leche
- 1 cucharada de polvo de té Matcha
- 2 cubitos de hielo
- endulzante al gusto
- agua
Del mismo modo que el anterior, disolvemos el Matcha en un poquito de agua caliente, hasta que no queden grumos. Pondremos en una batidora el hielo, la leche, el endulzante si lo usamos, y el Matcha disuelta en agua. Nos tendremos que asegurar que nuestra batidora tiene potencia suficiente para picar hielo.
Una vez dentro, picamos hasta que esté el hielo triturado, y nos quedará una bebida espumosa con textura de granizado. Servimos y ¡a disfrutar!
¿Sabéis todas las propiedades del Matcha?
Se conoce como el té que no se infusiona, sino que se bebe. Y esto se debe a que las hojas del té Matcha se muelen, después de un proceso de cultivo específico en el que las hojas, durante un tiempo, se tapan para protegerlas del sol, y así concentrar más clorofila y nutrientes, motivo por el cual tiene ese color verde intenso. Después las hojas se dejan secar, y finalmente se muelen, así que estamos tomando literalmente el té.
Por esta razón, las propiedades del Matcha son más elevadas que en el resto de infusiones. Se dice que es similar al té verde, pero multiplicando sus beneficios.
Es un alimento que nos produce bienestar, relajación, a la vez que nos da energía. También se dice que es un magnífico antioxidante, con mucha fibra, y desintoxicante. Eso sí, tenemos que tener cautela, puesto que contiene cafeína en cantidades considerables.
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