Roscón de Reyes integral relleno de nata

Este Roscón de Reyes integral está aquí por vosotros…

No porque expresamente me pidierais un Roscón de Reyes integral, pero sí uno diferente. Uno que salga de lo tradicional, sin ingredientes refinados. Y por eso lleva el nombre de integral.

Evidentemente, la miga no es igual que el tradicional, porque las harinas integrales actúan de forma distinta y quedan un pelín más secos. Pero con el relleno de nata, o uno de crema o trufa, os resultará un dulce delicioso. Y sabiendo que usamos buenos ingredientes en su preparación.

Aunque os recomiendo un robot para amasar, podríais hacerlo perfectamente a mano, pero tened en cuenta que los tiempos de amasado aumentarán, y disfrutaréis un poquito más masajeando la masa para que desarrolle el gluten y así conseguir una masa lisa, homogénea y que leve bien.

Ingredientes para el Roscón de Reyes integral relleno de nata:

• 270 gr. de harina de espelta integral (podría ser harina de trigo integral)
• 13 gr. de levadura fresca
• 75 ml. de bebida vegetal (o leche)
• 1 huevo M
• 1 pizca de sal
• 50 gr. de azúcar de coco
• ralladura de 1/2 naranja
• 65 gr. de aceite de oliva
• 1 cucharadita de vainilla
• Opcional: 1 cucharadita de anís o agua de azahar
• leche, para pintar
• almendra laminada, para espolvorear
• 200 ml. de nata montada, para rellenarlo

Preparación del Roscón de Reyes integral relleno de nata:

En primer lugar, pondremos la leche en el microondas durante unos segundos, para templarla. No es necesario que esté caliente, simplemente templada. En ella, desmenuzamos la levadura y la removemos con una cuchara, para que se diluya completamente.

Por otro lado, ponemos la harina en el bol de la amasadora. Añadimos también el azúcar, la sal, la ralladura de naranja y mezclamos un poco. A continuación, vertemos en los sólidos el huevo, la vainilla, el aceite, y la leche con la levadura. También pondremos ahora el anís o el azahar si lo usamos.

Ahora, empezamos a amasar, a velocidad baja, durante unos 10 minutos. La masa será bastante pegajosa. Pero, si observáis que está demasiado como para trabajarla, podéis añadir 10 gr. de harina más. Una vez la masa esté lisa y homogénea, nos aceitamos las manos, la sacamos del bol de la batidora, y le damos forma de bola. Seguidamente, la ponemos en un bol aceitada, tapamos con film transparente, y dejamos en un lugar seco y cálido durante unas 3 horas, o hasta que veamos que dobla su volumen.

Pasado el tiempo, la sacamos del bol, desgasificamos, y ponemos sobre una bandeja de horno forrada con papel vegetal. La aplastamos, formando un círculo ovalado, y le hacemos un agujero en el centro. Con los dedos, iremos haciendo grande este agujero, como si formáramos un óvalo de masa alargado. Tapamos de nuevo con film transparente, o un paño húmedo, y dejamos doblar el volumen de nuevo (unas 2 horas más).

Ahora, precalentamos el horno a 180ºC. Seguidamente, pintamos el roscón con leche, o huevo batido si lo queremos más brillante, y espolvoreamos almendra laminada por toda la superficie. Introducimos en el horno durante 20 minutos, o hasta que empiece a dorarse.

Para rellenarlo, esperaremos a que enfríe, una vez fuera del horno. Lo cortamos con un cuchillo de sierra por la mitad y rellenaremos con nata montada (que podéis endulzar al gusto). ¡No olvidéis la figurita escondida en él!

Lo guardamos refrigerado hasta consumir.