Cheesecake de frutos del bosque

Una cheesecake de frutos del bosque que, como la semana pasada, será un básico para este verano.

Porque la cheesecake de frutos del bosque que verás a continuación, además de refrescante, es bonita, es sencilla de preparar, es una tarta sin horno y que podemos preparar de un día para otro. ¿Lo mejor? Que está hecha con frutos del bosque congelados, de La Sirena. Son un ingrediente que nunca falta en mi congelador, porque me van estupendamente para preparar un helado en cinco minutos, añadirlos a un smoothie, a muchos postres… Incluso para la cheesecake de frutos del bosque de hoy. Que sin duda, es una de mis favoritas.

cheesecake de frutos del bosque

Y además, he preparado esta tarta de frutos del bosque con motivo del 35 aniversario de La Sirena. No se me ocurre una idea mejor que celebrarlo que con una rica tarta, ¿verdad que sí? Cuando me propusieron preparar algo para festejarlo, no dudé ni un solo momento en que tendría que ser algo con este producto. Porque, como os digo, siempre tengo una bolsa en el congelador. Me parecen versátiles, deliciosos, y una opción muy sencilla para tener lista para usar en el instante en que nos apetezca.

No quiero dar más rodeos… ¿Os apetece que veamos cómo hacerla?

cheesecake de frutos del bosque

Ingredientes para el Cheesecake de frutos del bosque:

Para la base:

  • 80 gr. de galletas de espelta
  • 15 gr. de cacao puro en polvo
  • 50 gr. de mantequilla de almendras
  • 35 gr. de mantequilla, fundida

Para el relleno:

  • 480 gr. de crema de queso
  • 200 ml. de nata para montar + 50 ml. para fundir la gelatina
  • 6 hojas de gelatina + 2 hojas para la cobertura
  • 300 gr. de frutos del bosque congelados de La Sirena
  • 65 gr. de miel
  • 1 cucharadita de vainilla

Para decorar:

cheesecake de frutos del bosque

Preparación del Cheesecake de frutos del bosque:

En primer lugar, prepararemos la base. Para ello, trituramos las galletas con una picadora eléctrica y las mezclamos con el cacao y las dos mantequillas, hasta obtener una textura de arena mojada. Ésta, la extendemos en la base de un molde desmontable de 15 cm. de diámetro, al que habremos forrado su base con papel vegetal.

Con la ayuda de una cuchara, presionamos hasta que la galleta quede compacta y adherida al molde. Refrigeramos. Por otro lado, ponemos el queso crema en un bol, y batimos ligeramente con un tenedor. Le añadimos la vainilla y la miel, y removemos hasta que esté homogéneo.

Por otro lado, hidratamos las hojas de gelatina en agua muy fría. Cuando estén hidratadas, cogemos 6 hojas y las diluimos en los 50 ml. de nata, que habremos calentado 30 segundos en el microondas. Cuando esté bien diluida, la vertemos en la crema de queso con la vainilla y la miel, y mezclamos todo. Ahora, montamos los 200 ml. de nata, con las varillas eléctricas, hasta que forme picos firmes. Ésta, la integraremos con la ayuda de una espátula y movimientos envolventes, a la crema de queso.

Seguidamente, separamos la mezcla de queso en tres partes iguales. Una de ellas, la dejaremos en blanco, y las otras dos les pondremos frutos del bosque. Pero en diferentes tonos. La parte blanca, la vertemos sobre la base de galleta, extendemos bien y refrigeramos. Ahora, trituramos los frutos del bosque con la batidora de mano. Cogemos dos cucharadas del puré de frutos del bosque, y lo vertemos en la segunda parte de la crema de queso. Removemos bien. Cuando la parte blanca que tenemos refrigerada esté cuajada, la vertemos sobre ella.

Ahora, ponemos 4 cucharadas del puré en la última parte de la crema de queso, para que tenga un color más intenso. Cuando la capa con un color menos intenso esté cuajada, vertemos ésta sobre la otra, extendemos y volvemos a refrigerar.

Por último, haremos la capa superior más intensa de color…

Nos quedan dos láminas de gelatina hidratadas, que las diluiremos en el puré de frutos del bosque restante. Antes, calentamos un poco el puré en el microondas para que esté caliente. Vertemos las hojas de gelatina hidratadas y removemos bien hasta que esté completamente unido. Ésta última capa, solo de frutos del bosque, la vertemos en la capa anterior. Volvemos a refrigerar durante un mínimo de 4 horas. Aunque, estas tartas, están mejores de un día para otro.

Antes de servir, decoramos con frutos del bosque congelados.

cheesecake de frutos del bosque

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