Swiss Roll de arándanos
Hoy en Delicious Martha conoceremos un poco más a fondo el Swiss Roll, también conocido como brazo de gitano, roulade, … Tiene muchos nombres distintos, dependiendo de la zona de consumo y los ingredientes que se usan en su elaboración.
Como ya sabréis, se trata de un bizcocho cubierto con alguna crema, mermelada, compota, … que posteriormente se enrolla sobre sí mismo y se corta en rebanadas; dejando a la vista el espiral que forma la masa. Para su presentación, es habitual espolvorearlo con azúcar o cubrirlo con crema quemada, chocolate, u otra cobertura similar.
Se dice que este dulce nos llega porque un monje, en su recorrido alrededor del mundo, lo probó en un monasterio de Egipto y lo trajo a la península Ibérica, llamándolo brazo egipciano. Más adelante, el nombre derivó en ‘de gitano‘.
También es muy conocido en otros países, como Francia (Gâteau roulé), Hungría (Piskóta tekercs), Suiza (Roulade o Biscuitrolle), Chile y Colombia (Brazo de reina), Gran Bretaña, Hong Kong y USA (Swiss Roll).
Éste último nombre es el más común cuando se prepara con mermelada y se espolvorea con azúcar, el que os muestro hoy en Delicious Martha. En cambio, si hablamos de ‘brazo de gitano‘ nos referimos más bien a un relleno de crema o nata.
En Sudamérica (donde es especialmente popular en Venezuela, Puerto Rico y El Salvador) lo podemos encontrar con nombres distintos según donde se consuma. Los rellenos más comunes son el dulce de leche y la crema, decorado con azúcar glas o chocolate.
En Argentina (Arrollado) preparan la versión salada con jamón, queso, lechuga, mayonesa, tomate, … Es decir un pastel vegetal, muy habitual en todas las casas argentinas en fin de año.
Ingredientes para unas 15 rebanadas de Swiss Roll:
Para el bizcocho:
- 100 gr. de azúcar
- 4 huevos, separadas las yemas de las claras
- 100 gr. de harina de repostería
Para el relleno:
- Mermelada de arándanos (mejor si es casera)
Para decorar:
- azúcar glas
Preparación:
Precalentar el horno a 180ºC.
En un bol amplio y con la ayuda de unas varillas eléctricas, batir las claras a punto de nieve fuerte y reservar.
En otro bol, mezclar las yemas con el azúcar y batir también hasta que doblen su volumen y blanqueen.
Ir añadiendo cucharadas de las claras montadas a la mezcla de las yemas y el azúcar e ir mezclando con una espátula y en movimientos envolventes, para evitar que pierdan el aire.
Cuando esté totalmente incorporado, tamizar la harina e ir añadiéndola poco a poco a la mezcla, con los mismos movimientos circulares, del exterior hacia el interior.
Forrar una bandeja de horno con papel vegetal y extender la masa en una capa fina, cubriendo toda la superfície.
Hornear 8 minutos o hasta que tenga un ligero tono dorado.
Retirar del horno, poner un trapo húmedo encima y voltear. Enrollar con el trapo (sin retirar el papel) y dejar enfriar completamente a temperatura ambiente.
Una vez frío, desenrollar, retirar el papel vegetal con cuidado y repartir la mermelada sobre la superfície de la masa. Dejar 2 cm. sin cubrir para poder cerrar bien el roll.
Empezar a enrollar sobre sí mismo por la parte más larga.
Cerrar y sellar la base con el mismo peso del bizcocho.
Con un cuchillo de sierra, cortar rebanadas de unos 2-3 cm., espolvorear con azúcar glas y servir.
NOTAS:
- Para la versión original podemos usar mermelada de frambuesa, fresa, arándanos, frutos rojos, … pero la versatilidad de este postre nos da muchas más posibilidades
- Es preferible consumirlo el mismo día, pero en un recipiente hermético podemos conservarlo durante pocos días.
Deja una respuesta
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.