Sobremesa en Escocia: Cranberry Shortbread [Galletas de mantequilla y arándanos]

Las shortbread son las galletas escocesas de mantequilla por excelencia. Hoy en Delicious Martha nos vamos a éste país para poder disfrutar de unas maravillosas Cranberry Shortbread galletas de mantequilla con arándanos. 

Aunque su origen sea escocés, allá por el siglo XII, hoy en día su receta está mundialmente extendida; siendo más populares en Reino Unido, Suecia, Dinamarca e Irlanda.
La denominación shortbread proviene de la abreviatura de shortening, un término culinario referido a las masas elaboradas a partir de grasa animales.
Su elaboración es extremadamente sencilla y con pocos ingredientes: 3 partes de harina de trigo (originalmente se usaba de avena), 2 partes de mantequilla (antiguamente manteca de cerdo) y 1 de azúcar.
Son galletas densas y crujientes, ya que no contienen ningún tipo de impulsor ni huevo, y se desmigan ligeramente al morderlas. Pero al mismo tiempo suaves y con un delicioso aroma a mantequilla.
Deben hornearse a baja temperatura para que cojan un dorado muy ligero, quedando más bien claritas y tradicionalmente se han presentado de tres formas distintas, todas ellas agujereadas con un tenedor antes del horneado (aunque a día de hoy podemos encontrarlas muy variadas):
Petticoat Tails: Un círculo grande, cortado en triángulos después de la cocción
Shortbread Rounds: Galletitas redondas pequeñas
Fingers: Rectangulares alargadasLas que hoy os presento en Delicious Martha no tienen ninguna de las formas tradicionales, y contienen pedacitos de arándano, que le dan un toque ácido delicioso.
¡Espero que os enamoréis!
 
Ingredientes para unas 65 galletas de mantequilla y arándanos pequeñas:
  • 100 gr. de mantequilla, a temperatura ambiente
  • 85 gr. de azúcar
  • 150 gr. de harina
  • 40 gr. de arándanos secos, picados
  • 1 pizca de sal
  • 1/4 c/c de mezcla de especias (anís, canela, jengibre y nuez moscada)
Preparación:
En un bol amplio, mezclar la mantequilla ablandada con el azúcar, la sal, la harina y las especias.
Picar los arándanos y agregarlos a la masa.
Combinar todos los ingredientes hasta poder formar una bola.
Envolver con papel film y refrigerar durante 2 horas.
Precalentar el horno a 160ºC.
Con un rodillo, estirar la masa entre dos papeles de hornear hasta conseguir un grosor de 5 mm.
Con un cortapastas, formar las galletas y disponerlas en una bandeja de horno forrada con papel vegetal.
Hornear durante 12 minutos, o hasta que adquieran un ligero tono dorado por los bordes, sin que cojan mucho color.
Retirar del horno y dejar enfriar completamente a temperatura ambiente.

NOTAS:

  • En un recipiente hermético se conservan en perfectas condiciones durante muchos días
  • Podéis hacerlas con alguno de los cortes tradicionales o usando el cortapastas que más os guste
  • Es importante ir controlando el tiempo de horneado para que queden de color claro. Éstas galletas se hacen muy rápido.
  • Si os cuesta trabajar la masa, añadir una pizca más de harina

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